
Cambiando nuestras palabras cambiamos nuestro pensamiento.
El lenguaje positivo y las palabras que elegimos influyen directamente en el funcionamiento de nuestro cerebro y por tanto en nuestras decisiones, nuestras relaciones, nuestra salud y nuestra felicidad.
Con un lenguaje más positivo mejorarás tus resultados tanto en lo personal como en lo profesional. Incluir el lenguaje positivo en tu vida diaria es muy sencillo. Tan sólo es necesario saber cómo hacerl0 y entrenarlo.
